¿Qué es un Depósito de Valores?
Un depósito de valores es un contrato entre un agente y un intermediario, también conocido como broker, que adquiere el compromiso de a través de una cuenta, administrar una cartera de valores de renta fija o variable en la que se encuentran títulos como las obligaciones o las acciones. De forma simplificada el depósito de valores se podría definir como una cuenta corriente que utilizan un operador y su broker para cargar inversiones y recibir las ganancias de las operaciones que resulten rentables.
¿Para qué es necesario?
Este instrumento es necesario para operar en el mercado, por lo tanto son los propios brokers quienes se lo ofrecen a sus clientes. Una vez que el operador decide contar con ese intermediario y su depósito de valores los títulos que adquiera al operar en el mercado son administrados y custodiados por el broker que además, se lleva una comisión por realizar esta labor. En ocasiones el porcentaje de esta comisión es fijo y en otras es negociable y depende de los objetivos que se logren en las operaciones, aunque eso depende del intermediario y de la entidad financiera que lo respalde.
Cada vez más entidades bancarias ofrecen a sus clientes diferentes servicios para operar en los mercados, entre ellos está la asignación de un broker. Además, los bancos también ofrecen depósitos de valores a sus clientes. Si un operador firma este contrato con una entidad tiene que tener en cuenta que el banco no puede operar ni mover los títulos sin autorización de su cliente y también está obligado a proporcionarle los títulos si este los solicita.