La actividad diaria de los traders puede acarrear muchos inconvenientes para los que no están preparados. Muchos son los motivos por los que estos profesionales pueden fracasar, algunos son derivados del propio proceso y otros de una falta total en el control de emociones.
La dureza del trading
En el mercado del cambio de divisas hay diferentes agentes y es frecuente codearse con auténticos expertos o con pequeños novatos que acaban de empezar. Un mal día, un conjunto de eventos negativos o una avalancha de información pueden hacer que el trader menos experimentado acabe agobiado y abandonando. A continuación, vamos a explicarte cuáles son los principales peligros de estos pequeños inversores.
1. Conocer el CFD
El trading de contratos por diferencia, conocido como CFD, es una operación sencilla y muy interesante para novatos, ya que no hay que comprar ni vender activos subyacentes. Sin embargo, debes conocer bien las características del CFD para operar sin sobresaltos, pues no está exento de riesgos. La buena noticia es que puedes conseguir ciertas ganancias si aprendes cómo se comporta el mercado.
Estas son sus principales funcionalidades:
- Te permite invertir de forma estándar para obtener beneficios cuando el precio de tu inversión suba.
- Puedes abrir una posición corta, es decir, que ganarás cuando baje el precio del mercado subyacente. También se llama ir o vender en corto.
- Es apalancado. Esto significa que no has de pagar el total por la posición desde el principio si quieres una exposición mayor. A veces, con un pequeño porcentaje es suficiente para operar.
- Se conoce como trading con margen a las operaciones donde los fondos que se necesitan para mantener o abrir una posición solo son parte del conjunto total. Hay dos tipos de márgenes, los de depósito y los de mantenimiento. Los primeros sirven para abrir posiciones y los segundos funcionan como garantía en caso de pérdidas.
2. La importancia de las emociones
Como ya hemos comentado en la introducción del post, además de las pérdidas o de la frustración que pueden acarrear las operaciones de trading, los traders pueden fracasar debido a una mala gestión de sus emociones. La formación siempre te va a servir de ancla, pero nunca has de olvidar que perder forma parte del juego.
Los movimientos arriesgados, la impaciencia o el estrés provocan que algunos inversores se dejen llevar por impulsos y se embarquen en operaciones temerarias que, en la mayoría de casos, conllevan pérdidas importantes. Lo peor es no saber parar a tiempo y seguir por esa senda con la única idea de recuperar ese dinero a toda costa.
Las únicas emociones que han de guiar al trader son la paciencia y, sobre todo, la templanza. Para ello, hay que entrenar, ser constante y descansar cuando sea necesario. La mejor estrategia que puedes hacer es trazar un plan desde la tranquilidad y con objetivos claros.
Si te notas muy nervioso, lo más recomendable es que te tomes un respiro (pasea, haz deporte, dedica un tiempo a tu hobby favorito…). También puedes reflexionar acerca de tus emociones. Tras esto, puedes volver a pensar en tu estrategia, esperar una señal para actuar y hacer una operación con la cabeza bien fría.
En definitiva, muchos traders fracasan en sus operaciones debido a su falta de control emocional. Si bien es verdad que han de aprender cómo son las reglas del juego del trading CFD, los nervios o un mal día pueden nublarles la mente y provocar que se embarquen en operaciones peligrosas. Sin duda, la templanza, el sentido común y la formación son las claves para alcanzar el éxito. ¡Infórmate mejor suscribiéndote al Club BPT!