Las diferencias entre precio y valor son la base en la que se sustenta la filosofía del Value Investing (Inversión en Valor). Este estilo de inversión trata de buscar acciones que tienen valor, pero su precio no lo refleja.
Pero ¿qué es el precio y qué es el valor? Conocer y diferenciar ambos conceptos es el primer paso para abordar una de las estrategias de inversión más sólidas; precisamente la que lleva a cabo Warren Buffett. Si sigues leyendo, descubrirás sus fundamentos.
¿Qué es el precio?
El precio es sencillamente la cifra a la cual algo se compra y se vende en el mercado. Fluctúa constantemente como consecuencia de la oferta y la demanda.
Si hay más compradores que vendedores, el precio tenderá al alza porque la demanda supera a la oferta.
Por el contrario, si los inversores no tienen interés en comprar y hay más ventas, el precio sufrirá una presión a la baja porque la oferta es mayor.
Es sencillo conocer el precio de las acciones cotizadas en bolsa, puesto que es público y se trata de una cifra determinada. En otro
¿Qué es el valor?
El valor hace referencia al precio intrínseco o teórico. Es decir, el precio objetivo que deben tener aquello que se va a comprar o vender. En el caso de las acciones en bolsa, se obtiene mediante un análisis fundamental de la empresa.
Al igual que sucede con los inmuebles, para calcular el valor de las acciones es necesario realizar una “tasación” de la empresa y determinar el “precio que objetivamente deberían tener”.
No existe un único método para valorar empresas y las cifras que arrojan son sólo estimaciones.
¿En qué se diferencian?
Como habrás observado, el valor algo no tiene por qué coincidir con su precio. Es más, a veces la diferencia entre precio y valor puede llegar a ser significativa.
Hay una de Warren Buffett que define muy bien las diferencias entre valor y precio: “el precio es lo que pagas y el valor lo que recibes”.
Volviendo al ejemplo de los inmuebles, una tasación arroja una cifra determinada e informa de cuál sería el precio adecuado para una vivienda, pero su precio lo establecen el comprador y el vendedor mediante acuerdo y no tiene por qué ser igual.
Existen cosas que tienen valor pero no precio. Por el contrario, una pintura de un artista tiene un valor mucho mayor que simplemente el precio de sus materiales y el tiempo dedicado.
Del mismo modo, existen acciones con una gran calidad y potencial para ofrecer rentabilidades, pero no cotizan al precio que deberían.
Teniendo claros estos dos conceptos puedes encontrar gangas en la bolsa. Es decir, acciones que cotizan a un precio inferior que su valor objetivo. En nuestro club de bolsa te enseñamos cómo.
Seguro que lo entiendes mejor con un ejemplo.
Valor VS Precio Ejemplos
Imagina que quieres comprar las acciones de una gran cadena de hoteles. Al realizar un análisis fundamental de la empresa observas que está bien gestionada, tiene una fuerte posición financiera, una gran imagen de marca y calculas que la valoración de cada una de sus acciones puede rondar los 35 €.
Como hemos comentado, existen varias fórmulas para estimar el valor de una empresa y ninguna de ellas nos puede ofrecer una cifra exacta, sino aproximada.
Después, te paras a analizar su gráfico de cotización y ves que su cotización en el mercado es de 15 €. En otras palabras, las acciones tienen un precio de 15 €.
Así pues, compruebas que la empresa cotiza con un descuento del 42,85% sobre su valor. Es un porcentaje importante. Por mucho que no puedas estimar con exactitud su valoración, existe un gran margen de seguridad.
Has encontrado una ganga en el mercado.
¿Por qué pasan estas cosas? El mercado reacciona cuando, por cualquier motivo, la empresa ha comunicado malas noticias o se espera que desciendan sus ingresos. Las acciones pueden subir y bajar con fuerza en el corto plazo, puesto que la oferta y la demanda tiende a exagerar los acontecimientos.
No obstante, a largo plazo, la empresa tiende a ajustar su valoración real, aunque siempre existirán algunas diferencias entre el valor y el precio.