¿El éxito del trading depende del activo que elijamos?
El operar nuevos activos no suele ser fácil para un trader. En general, un trader se suele plantear comenzar con un nuevo activo cuando no le está yendo bien con el plan de trading que está aplicando a otros activos. Es decir: en muchos casos, el operar nuevos activos supone “darle una patada a la lata para encontrarla más adelante”, posponiendo un problema de ausencia de éxito en el trading que probablemente no se solucione “cambiando el activo” con el que se opera.
En otras ocasiones, el trader acude a operar un activo nuevo porque otro trader se lo ha recomendado, bajo la idea de que él tiene un gran éxito operando ese activo.
Antes que nada, debemos aclarar que el éxito del trading no se encuentra en absoluto en elegir un activo concreto. No hay ninguna razón para pensar que un activo o mercado concreto nos va a ofrecer en términos absolutos más aciertos que otro.
La clave está en el plan de trading adecuado
El secreto del trading se encuentra en tener un plan de trading avalado por una experiencia de éxito. Y es cierto que cada activo tiene su idiosincrasia: volatilidad, horarios, tamaño de las posiciones, correlaciones con otros activos… Cuestiones que sin duda debemos de tener en cuenta. Pero si nuestro plan de trading aplicado a un activo está fallando, tendría mucho más sentido que ajustemos el plan de trading (sistema de entradas y de salidas), que el que pretendamos cambiar de activo.
Además casi todos los traders, al menos en España, suelen invertir en los mismos activos: alguno de los principales índices europeos o americanos, alguno de los principales pares de divisas y las principales materias primas, como el oro o el petróleo. Salir de estos activos es francamente inusual. Además, lo que no me está funcionando para el “DAX”, tampoco me va a funcionar en el “Eurostoxx 50”; de la misma manera que si mi operativa en el EUR/USD no está teniendo el éxito esperado, pretender mantener el mismo sistema pero aplicarlo al EUR/JPY difícilmente va a funcionar.
Más datos
Si ponemos esta idea al revés, nos encontramos ante una situación parecida: si nos está yendo bien operando en el S&P500, comenzar a operar en el Nasdaq no va a multiplicar nuestros resultados.
Lo que sí que podría tener más sentido es un cambio total en el plan de trading si el que estoy utilizando no me está resultado lo suficientemente exitoso. Y el emigrar a un nuevo plan de trading puede llevar perfectamente asociado el cambio de activo dentro de una reestructuración total del sistema.
Y por último, también podría tener sentido el fijarnos en nuevos activos que se salen de lo habitual. Por ejemplo, en materias primas que tienen un calendario estacional concreto, o que se ven afectadas por datos concretos. Pero lo más sano para realizar este ejercicio de prestar atención a nuevos activos es cuando estamos teniendo éxito en nuestro trading habitual. Es decir: debemos ver el trading sobre estos nuevos activos “particulares” como un complemento a nuestro plan de trading central, y no como una huida del mismo.